La existencia de garrapatas es casi algo inevitable, pues se acompaña del ambiente en el que se desarrollan los animales y en las condiciones en las que se encuentran y estas son portadoras de enfermedades. Una de ella es la borreliosis.
La borreliosis también llamada “enfermedad de lyme”, es causada por la espiroqueta Borrelia burdogferi y transmitida a través de las garrapatas del género Ixodes.
Crea varias complicaciones en la salud de nuestra mascota, haciendo que se presenten diversos síntomas que en la parte de abajo conocerás.
Síntomas de la Borreliosis.
Una de las señales más comunes es que, al momento de caminar, se le note cojo de cualquier pata; puede ir variando entre la izquierda y la derecha. También se puede ver mejoría en unos cuántos días y volver tiempo después si no es tratado.
Entre lo más comunes son: artritis o deformaciones en las articulaciones, fiebre, falta de apetito, pereza, dolor de cuerpo, problemas renales, inflamación en los ganglios linfáticos, diarrea y vómito. En casos graves el corazón se inflama, el sistema nervioso es afectado y daña severamente los riñones.
En la zona donde la garrapata picó tiende a inflamarse y causar irritación.
Tratamiento de la Borreliosis.
Dependiendo de las partes afectadas y de los síntomas, dependerá de la administración de los medicamentos y antibióticos necesarios para que se alivie. El veterinario se encargará de diagnosticar lo que está sucediendo con él o ella, nadie más tiene el poder de hacerlo, por lo que remedios caseros ante una enfermedad no se recomiendan sin la opinión de un profesional.
Para que un experto animal pueda saber qué es lo que exactamente tiene, podrá realizar estudios de sangre y de orina para descartar virus o bacterias que sean un motivo por el que se encuentre en ese estado. Las ecografías y radiografías también entran en un sistema de observación.
Los anticuerpos que pueden detectarse en la sangre varía entre la tercer y quinta semana después de que alguna garrapata haya mordido al canino, incluso antes de que se presenten síntomas. Esto puede ayudar a que se actúe más rápido.
La duración no se puede determinar, pues ésta varía mucho de la intensidad con la que se desarrolle.
Prevención de la Borreliosis.
La mejor manera de prevenir es a través del aseo constante y del corte de pelo, no es necesario rapar, pero sí evitar la acumulación. Cualquier herramienta anti pulgas es útil, recuerda no emplear sustancias tóxicas u otra cosa que perjudique su estado de salud.
Otra forma de hacerlo es por medio de la desparasitación, lo que ayudará a que su sistema inmune se fortalezca. También una limpieza rigurosa después de haber estado al contacto con el campo, jardín o parques, que es donde comúnmente están.
Vacunar a nuestras mascotas es de suma importancia y será la mejor arma. A día de hoy existen tres tipos de vacunas que generan anticuerpos que ayudan a combatir la enfermedad: basada en la proteína OspA, OspC y la que es directamente contra la bacteria.
¿Puedo quitarle las garrapatas a mi mascota por mi cuenta?
La respuesta es sí, en caso de que el perro no tenga una enfermedad contagiosa tanto para los animales como para los humanos. Sin embargo, este no es un proceso que pueda realizar cualquiera. Si desconoces cómo sujetar al animal e inmovilizarlo, y el proceso para retirar la garrapata de inmediato y en una sola pieza, lo mejor es que acudas con un veterinario con experiencia para que lo haga por ti.