Pareciera ser un tormento intentar cambiarse de casa para ti y para tu gatito. Alejarse de todo aquello a lo que estaban acostumbrados es un paso más a una nueva vida. Incluso para él.
Los gatos son considerados como animales que tienen su rutina muy marcada, para todo tienen un horario establecido; hora de comida, hora de jugar y hora de dormir. Por este motivo, acoplarse a su nueva rutina no será nada fácil y menos si es nervioso.
Por ello, si estás pensando en mudarte con tu felino, será fundamental comprender que él necesitará su propio tiempo de adaptación a la nueva casa. Lo ideal es que esta transición se lleve a cabo como un proceso gradual, y nunca de forma repentina y brusca. De esta forma, será posible favorecer la adaptación de tu felino y hacerle sentir cómodo y seguro en su nueva casa.
No te preocupes, nosotros te diremos qué hacer en caso de querer mudarte…
1. Antes de empacar.
Antes de empezar a empacar todas tus pertenencias, preparar al gato psicológicamente es muy positivo. Para esto, lo que harás es hablar con él acerca de lo que harán el día siguiente, en una semana o el tiempo que sea. Obviamente no entiende perfectamente todo lo que le dices, pero estamos muy seguros que antes de que se llegue el día, estará tranquilo porque algo en su cabeza lo conectará contigo.
2. Antes de subir todo sobre el transporte.
Asegúrate de organizar todas sus pertenencias en un mismo lugar, ¿por qué? Simplemente como medida de prevención a olvidar algo y ahorrar tiempo muy valioso. Es probable que te encuentres físicamente bajo estrés y para evitar problemas, es mejor hacerlo.
3. Aleja a tu gato del movimiento de mudanza.
Con alejar nos referimos a evitar que se sienta presionado por tanto movimiento de objetos, gente o que no le guste que invadan su espacio. Mantenerlo en una habitación con todas sus pertenencias es ideal y positivo como en el punto anterior.
Incluso, puedes colocar sobre la puerta de la habitación en donde se encuentre, un letrero o aviso que describa que allí se encuentra él. Adentro puede estar un familiar para entretenerlo y para que no se sienta solo durante ese tiempo.
4. Hora de llevarlo al coche.
A menos de que sea un gato muy obediente y que le guste recibir órdenes, su caja de transporte no será necesaria, pero lo sabemos, no suelen ser así. Un transportin te será muy útil para estas situaciones, te sentirás muy segura cuando sea el momento de llevarlo al coche.
5. Llegando al nuevo hogar.
Para facilitarte el acoplamiento a su nuevo hogar y a su nuevo espacio personal, puedes aplicar feromonas faciales felinas sintéticas. Regularmente los gatos emiten feromonas a través de glándulas, estas a su vez, tienen como función una especie de “marcaje” en su territorio.
6. Aliméntalo.
Alimentar a tu gato sería una buena opción, puede ser que después de tanto movimiento se es encuentre exhausto. También funciona como una acción acogedora para ellos.
7. Reconocer el perímetro.
Al haber finalizado el acomodamiento de los muebles y de organizar todas tus pertenencias, es momento de que le permitas explorar el resto de la casa, para que identifique en dónde se encuentra todo y para que poco a poco vaya aceptando su nuevo hogar.
¿Qué hacer si mi gato es nervioso?
Consultar al veterinario antes de viajar es una excelente opción, puede recomendarte algún calmante para ayudarle a soportar mejor el trayecto del viaje.
Ojo, darle de comer dos o tres horas antes de salir es lo más recomendable para evitar algún “accidente” dentro del auto. Regularmente los gatos nerviosos temen a permanecer encerrado en un transportin y más en un auto, por lo que sus nervios pueden ir más allá.
Transportarlo en una cesta o un transportin, que son hechos para ellos a la medida, será un lugar seguro para que permanezcan dentro.
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