¿Cada cuánto debo de cambiar el agua de mi mascota?

Aunque no sea familiar relacionar una enfermedad a causa del plato de tu mascota, esto pasa y con mucha frecuencia. No estamos enterados de lo que realmente puede suceder sin una constante limpieza de los recipientes donde suelen comer o beber agua.

Si no cambias y desinfectas el envase donde come o toma agua, llegará a ser muy prejudicial. La acumulación de microorganismos enfermará a tu perro o gato, pudiendo llegar a desarrollar moquillo, parvovirus o hepatitis infecciosa.

Algunas de las enfermedades que puede adquirir un perro por no tener como hábito limpiar los recipientes, es el moquillo, que se transmite por el aire y mediante el contacto con fluidos corporales infectados, incluyendo comida y agua contaminados por estos fluidos. Una vez que el envase contenga de estos microorganismos, el perro (obviamente sin saber) tomará agua y con esto, estará infectado.

¿Cada cuánto se debe de desinfectar su plato o vaso?

Debemos de hacerlo de forma cotidiana, alrededor de cada tercer día, pues no bastaría con una vez por semana como muchos están acostumbrados. Ten en cuenta que sería imposible eliminar todos los microbios y bacterias, pues estos viven en todos lados y se propagan rápidamente. Pero sí puedes mantener controladas algunas enfermedades e infecciones anteriormente dichas.

¿Cómo puedo desinfectarlos?

Resultaría muy práctico hacerlo con un detergente común y corriente, sin embargo, no es del todo bien hecho. Lo mejor que puedes hacer sería utilizando detergentes especiales que no perjudicaran su estado de salud, por lo que sería mejor evitar aquellos que contengan ciertos elementos de limpieza que son muy eficientes eliminando microorganismos, pero que dañan a nuestras mascotas.

Elementos que dañan su salud.

Cloro.

Aunque sea muy utilizado precisamente para desinfectar y eliminar bacterias, aplicar éste en los platos o recipientes donde comen o beben agua, puede ocasionar mareos, vómitos y edema laríngeo; eso sí sólo llegase a olerlo. En dado caso que haya bebido una porción, le provocaría una intoxicación y podría morir.

Éteres de glicol.

Se encuentra en limpiadores de cristales, limpieza de alfombras, y quitamanchas, vinculado a la anemia, daño pulmonar y daño renal en personas y animales domésticos.

Formaldehido.

Se utiliza en productos tales como jabones y hasta algunos champuses de mascotas, un carcinógeno que puede contribuir al asma.

Existen variedad de elementos que ponen en riesgo la salud de los animales y de los que mucho detergente depende en su composición. A ellos les basta con oler este tipo de desinfectantes y sin llegar al punto de beberlo para que sean letales.

Te recomendamos preguntar a un profesional sobre los limpiadores que tienes en casa o de lo que sean una buena elección.

Lo mismo pasa en donde come tu mascota, se debe de limpiar cotidianamente para evitar una acumulación de bacterias que puedan dañar la salud de nuestros compañeros de vida.

Para una limpieza más natural, se puede usar vinagre y agua en vez de jabón, aunque si te aseguras de aclarar bien el cacharro después de fregar, el jabón es la mejor opción. Puedes usar agua caliente para que te sea más fácil limpiarlo a fondo y deshacerte de aquellos pequeños trozos que se quedan incrustados. Por último, es fundamental dejar secar el cuenco hasta su próximo uso.