¿Es sano dormir con mi perro?

Es fácil encariñarse con un perro y una vez que se ha ganado tu corazón, no será raro que quieras compartir tu cama con él, en especial si es un cachorro y quieres mimarlo. Pero ¿es recomendable dormir con tu perro? A continuación te explicamos qué es lo más saludable para ti y tu mascota.

¿Por qué es bueno dormir con tu perro?

1.- Aliviará tu ansiedad y estrés. Dormir con tu mascota es una gran terapia si sufres de ansiedad o estrés. Al hacerte compañía, aumentan tu sensación de seguridad y alejan los pensamientos negativos de tu mente.

2.- Te dará calor en esas noches frías. Trata de acurrucarte con él mientras duermes, asi podras sentir su calor a la vez que refuerzas el vínculo que existe entre él y tú.

3.- Te permitirá descansar mejor. Un estudio del Centro del Sueño de la Clínica Mayo en Scottsdale, Arizona (EE.UU.) y publicado en  la revista Mayo Clinic Proceedings, concluyó que el hecho de sentir cerca a nuestra mascota hace que descansemos mucho mejor.

¿Por qué podría ser malo dormir con tu perro?

1.- Problemas en la salud. Si eres alérgico al polvo o pelos, puede que dormir con tus mascotas no sea ideal para ti. Además, si no desparasitas correctamente a tu mascota, además de exponerla a ella a enfermedades, también te estarás exponiendo a ti.

2.- Problemas en la conducta. Algunos caninos pueden desarrollar tal nivel de dependencia hacia ti que pueden volverse inseguros, ansiosos o deprimirse en exceso cuando no estás a su lado.

3.- Problemas de sueño. A pesar de que está comprobado que dormir con tu mascota mejora la calidad de sueño, aquellas personas de sueño ligero pueden tener problemas si su mascota es inquieta y suele despertarse en la noche.

CONCLUSIÓN

Como te habrás dado cuenta, no existe bueno ni malo. Solamente se trata de tus preferencias y las de tu mascota. Si decides compartir tu cama con él o ella, toma en cuenta los hábitos de sueño de ser de ambos.

También, considera que aunque decidas dormir con tu perro, él debe tener un espacio propio al que pueda acudir cuando no se encuentren en la habitación. Pon a su disposición una cama donde pueda recostarse para estar cómodo y cálido en espacios donde tú pases mucho tiempo pero no suelas recostarte, como el estudio o el comedor.

Si aún  tienes dudas sobre cuál es la mejor opción consulta a tu médico veterinario de confianza para que pueda orientarte de manera profesional.